En 1968 se estrenó una película que quedó en la historia de la cultura occidental. Su nombre sirve para titular esta crónica: ''La Fiesta Inolvidable''.
Quedará en la retina del deporte zonal. Pocas veces un partido de Federal tiene tanta gente en una cancha de cualquier parte del país. Simpatizantes del Rojo, de Cipo y del básquet de la región poblaron la Caldera con más de 1200 almas que presenciaron un partidazo en el quinto y decisivo punto de la serie.
Adentro, Matías Stival, Godoy Vega, Lucas Romera y Sebastián Tomasevich mostraron su jerarquía para que el cotejo llegara a un final cerrado.
El comienzo del Rojo fue ideal. Marcó bien y adelante fue efectivo. Sacó 10 de diferencia y obligó a Maxi Rubio a pedir minuto. A diferencia de lo sucedido en el juego 4, Cipo paró la bronca a tiempo. Se acomodó atrás con una zona que limitó al rival y empezó a anotar. El binomio Romera (8) - Godoy Vega (7) revirtió el tanteador y Cipo pasó al frente.
Los giros en el marcador fueron la constante del segundo parcial. Cuando parecía que uno se escapaba, el otro reaccionaba. Los ingresos de Tomasevich y Almendra armaron un festival de bombas en La Caldera. Ambos equipos llegaron a ponerse 5 puntos arriba, pero ninguno dominó el desarrollo por completo. Un parcial 13-2 del Albinegro dejó arriba en el marcador al cabo de los primeros 20 minutos.
Boudet y Stival salieron con todo en el inicio del complemento. Entre los dos se pusieron el equipo al hombro para igualar las acciones. El ingreso de Franco Allipi fue importante para controlar a Godoy Vega (7) y acompañar a los mencionados en ataque. Si bien Cipo estuvo siempre al frente, Independiente no se fue del partido. De hecho, un par de coreajeadas de Boudet dejaron el tablero igualado de cara a los últimos 10 minutos.
La Caldera fue un manojo de nervios. El contexto le da, entonces, más valor a lo que hicieron los protagonistas. La tónica fue la misma porque el Capataz tuvo más variantes (9 de Tomasevich, 6 de Romera y 4 de Godoy), y llegó a sacar 8 de luz (66-74) pero no lo liquidó nunca. Los dirigidos por Centeno no se dieron por vencidos.
El responsable de mantener viva la llama de su equipo y del partido fue Stival. No solo anotó 14 de los últimas 18 puntos de su equipo, sino que clavó una planilla con números de NBA. Sumó 8 rebotes y 8 asistencias a sus 28 unidades. Cada pelota hirviendo cayó en sus manos. Con un par de defensas al límite, el local recuperó la posesión y su base igualó el marcador a falta de 47 segundos.
Los pelos de punta. Farías no había influido tanto en el encuentro como al comienzo de la serie y sin embargo sacó a relucir su oficio. Anotó un doble cuando su equipo había estado al borde de perder la pelota y le dio la ventaja a Cipo. Stival no logró convertir en la siguiente ofensiva y Catelotti tampoco pudo capitalizar el rebote. Romera tuvo la primera chance de cerrar la victoria en la línea, pero hizo 1/2 y dejó un margen. Arias cortó con falta y Stival puso el 79-80 a falta de 9 segundos. La formación neuquina volvió a cortar con foul y Romera no perdonó para dejar otra vez diferencia de 3. La del final quedó para Riego, que tuvo la última desde larga distancia, pero el aro dijo no.
Un partido de película para una serie inolvidable, que nadie se quiso perder en la cancha o desde su casa por internet. Estaba para cualquiera y el 3-2 lo depositó a Cipolletti en la siguiente instancia contra Villa Mitre.
SÍNTESIS
Parciales: 19-20, 37-41, 57-57. Final 79-82.
CAI: Stival 28, Boudet 15, Almendra 9, Fedele 7, Riego 7, Catelotti 6, Allipi 4, Troncoso 3.
Cipo: Godoy Vega 24, Romera 23, Tomasevich 21, Farías 7, Arias 5, Hofmann 2.
Jueces: José Domínguez y Elías Ramboy
Cancha: La Caldera, 1200 personas.
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